Trend: pink coat

Hoy les comparto un cuento de navidad titulado: «El ~~estúpido y~~ sensual abrigo rosa».

Erase una vez una niña que creció con Barbie, Hello Kitty y todas las cosas rosas del mundo. Al pasar los años, su rubia cabellera y adoración por el rosa la convirtieron en la candidata ideal para ser niña mercadotecnia, ya saben de esas que quieren todo lo que tiene buena publicidad o se pone Rihanna.

En otra parte del mundo (olvidé decirles que el cuento es estilo Love Actually, al final se unen las historias lo prometo), Kanye West planeaba como hacer que Kim Kardashian se convirtieraen trendsetter y que la gente dejara por primera vez de ver su trasero, así que hablo a los ayudantes de Santa para que le confeccionaran un abrigo tan grande que lograra cubrirle el trasero y que le dieran un toque femenino.

Como los duendes ya tenían bastante trabajo haciendo los Iphone 5, iPads y otras tecnologías que todos los niños hispteriosos del mundo piden hoy en día, no tenían tiempo para hacerle el abrigo a Kanye West, así que mejor le plantaron una idea tipo Inception a algunos diseñadores para que ellos lo hicieran. Así marcas como Céline, Simone Rocha, Carven, Mulberry, Jonathan Saunders y otros crearon los abrigos rosa over-sized.

La niña mercadotecnia amante del rosa al ver el abrigo en Kim Kardashian no sintió la necesidad asfixiante de tenerlo, probablemente porque el trasero de la Kardashian era más grande que todos los traseros del mundo y como el de ella era pequeñito no tenía por qué ponerse un abrigo así.

Pero entonces el milagro navideño ocurrió, «tal vez el abrigo rosa over sized no era para aprovecharse de todas aquellas mujeres con debilidad por el rosa, ni para cubrir el trasero de Kim Kardashian y darle clase», pensó la niña mercadotecnia, «tal vez, quizá, el abrigo rosa es para dar un poco de pastel, brillos y unicornios a una época que por muchos años ha llenado de oscuridad el mundo de la moda».